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Foto :CantabriaRallye.net
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Foto :CantabriaRallye.net
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Foto :CantabriaRallye.net
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Después de Alisas, el mítico tramo de Asón, era donde se disputaba la prueba. La acción y los participantes quedaban «prendados» por la belleza del tramo de Asón, que se volvía a juntar con el automovilismo. En algunas zonas «el agua nieve» era la tónica dominante, aunque los aficionados seguían a pie de cuneta.
Espectáculo de PRIMERA, con unos coches de PRIMERA y un tramo, tambien de PRIMERA.
El tramo de Matienzo, era el que se disputaba a continuación. Verdadero tramo de Rallyes en donde los vehículos más potentes y los pilotos mas aguerridos disfrutarían de lo lindo, si bien el espectáculo, es predominante en esta prueba.
Para terminar los tramos de la mañana el tramo de Barcena de Cicero, con la subida a Secadura, además del famoso cruce de Río Lastras, en donde los pilotos rodaban con sus verdaderas joyas sobre ruedas.
Después reagrupamiento en Hoznayo, concretamente el parque de trabajo del Adelma, que dicho sea de paso, siempre a sido, LO MEJOR de la prueba para algunos aficionados.
Después de reponer fuerzas en Hoznayo, quedaba los dos tramos de la tarde; el de Hermosa, que una vez mas estaba COLAPSADO por tanta gente que acudía a la prueba y el de Peña Cabarga en donde finalizaba la prueba.
Finalmente la llegada al parque cerrado era apoteósica como en otras ocasiones.
En Hermosa, que tambien se disputaba en formato de Bucle, los aficionados, podía ver una vez mas a sus pilotos, en dos ocasiones.
De nuevo, GENTE, GENTE y MÁS GENTE, colapsaba todos los accesos al tramo, si bien la organización y los comisarios, volvían a verla por el correcto funcionamiento de la prueba.
Peña Cabarga era el tramo final de la prueba, para finalizar con la foto de familia, en lo alto del mirador. Después la bajada desde la peña, se hacia «custodiada» por los aficionados, que poblaban la carretera de acceso. Los pilotos se sentían queridos y arropados por la afición, que habían recorridos miles de kilómetros, para poder ver estos vehículos.
Después la entrada al parque de trabajo del Adelma era de lo más emotivo de la prueba. Los aficionados BRAMABAN a sus pilotos y vehículos, sintiendose arropados y queridos por los miles de aficionados, que esperaban en el Adelma.
Verdadero espectáculo, digno de ver y de vivir, llamado «Espíritu Trasmiera».
Quiero resaltar que en esta ocasión, se preparaba un pasillo, para los vehículos participantes, delimitado por «vallas de protección».
Decir que finalmente TODAS ESTAS VALLAS ERAN RETIRADAS por la organización, pues el «espíritu Trasmiera» no puede estar delimitada.
Todos los aficionados, tocaban, veían, aclamaban e incluso se arrodillaban, haciendo reverencias a sus pilotos y coches míticos.
Fotos, videos, rugidos de motores y en general el ESPIRUTU TRASMIERA, llegaba a todos. Los pilotos totalmente emocionados, la gente al borde de la epilepsia y volvía a nacer el ESPIRITU TRASMIERA, que solo allí dentro, uno puede comprender.
Lo que nació espontáneamente, en una de las ediciones, se ha convertido en el sentimiento de la prueba.
Así terminaba el espectáculo del Rallye Trasmiera. Tres días de motor en Cantabria, al mas alto nivel, demostrando que con el trabajo de TODO UN AÑO se puede hacer un espectáculo digno de ver.
Cuidemos este espectáculo, pues no somos conscientes de lo que se ha conseguido, con un grupo de JOVENES CHIFLADOS DE LOS RALLYES, que dejan durante todo el año, sus quehaceres, familiares y de trabajo, para traer el espectáculo del Rallye Trasmiera a Cantabria.
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!!! LA FOTO ¡¡¡
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La Foto de la prueba es para un grupo de aficionados de toda la vida. Tenemos a Oscar, Ramiro y compañía. |
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!!! LA FOTO 2¡¡¡
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Tenemos tantas fotos, que no sabemos cual poner. El Espíritu Trasmiera es ver la cara de pilotos y copilotos, alabados por los aficionados. |
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!!! LA FOTO 3¡¡¡
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La ultima foto, es para esa gente que se deja la piel durante TODO UN AÑO, para preparar un Rallye Trasmiera. |
