Luis María Oleaga, Carlos García, Iñaki Barredo, Begoña Etxebarria, Juan Lavado, y la Escudería Repsol Bilbao, fueron otros de los destacados en esta quinta edición.La jornada final de la quinta edición del Rallyestone de Vehículos Históricos no deparó sorpresas en lo que a la cabeza se refiere, siendo los cántabros Manuel Macho, padre e hijo, los que se llevaban definitivamente la victoria final, al volante de su laureado Porsche 911 SC, a pesar de solo haber podido ser el equipo cántabro noveno en esta última etapa, después de ser penalizado en uno de los controles horarios, aunque la ventaja obtenida en las dos jornadas anteriores, en las que conseguía sendas victorias parciales, les daba un margen más que suficiente para llevarse un trabajado triunfo final con una puntuación total de 244,4 puntos. Por detrás se clasificaban en esta cita otra saga familiar, concretamente la formada por los vizcaínos Imanol y Xabier Zorroza, igualmente padre e hijo, que tras ocupar la quinta plaza al final de la primera etapa, eran terceros al final de la segunda, y segundos tras esta jornada final, con su habitual Mercedes 280 CE, consiguiendo una puntuación total de 270,5 puntos.
Foto: Prensa Rallystone 2010
|
El podium final lo completaban los madrileños Juan Escavias y «Cuni» Suárez, sobre un Porsche 911 2.7 RS, con 306,7. Por detrás se clasificaban Carlos García y Víctor Garay (VW Golf Gti), con 370,4 puntos, Germán Núñez y Luis Andikoetxea (VW Golf Gti), con 392,8 puntos, y Aitor Villota y Asier Isasi, a los mandos de un Audi Coupe Gt, con 453,6 puntos, tras una última jornada en la que los cuarenta y tres equipos supervivientes tuvieron que afrontar los tramos de «Arrieta», de 14,87 km, «Bermeo» de 13,11 km, y «Errigoiti», de 21,67 km.
Tras finalizar esta última etapa, en la que la victoria parcial fue a parar a manos de Goyo Peñafiel y Alvaro Sedano, con un VW Escarabajo, y 27,8 puntos, seguido de Iker Reketa y Koldo Cepeda (BMW 635 CSI), con 31,6 puntos, y Ricardo Alonso junto a Moisés Alvarez, que llevaba al tercer puesto su BMW 2002 Tii, con 35,8 puntos, los participante arribaron de nuevo a la explanada frente al incomparable marco del Hotel Meliá Bilbao, que acogió en uno de sus salones el lunch final de rallye con los equipos participantes, familiares y miembros de la organización, y la posterior entrega de trofeos y recuerdos para todos los equipos participantes.
En este acto final también fueron galardonados los tres primeros equipos clasificados de la general final, como los tres mejores en la clasificación FEVA (Federación Española de Vehículos Antiguos), mientras que en la clasificación FIVA (Federación internacional de Vehículos Antiguos), el galardón se lo llevaban igualmente Manuel Macho, padre e hijo.
En la clasificación Mixta, los trofeos iban a parar a manos de la pareja vizcaína formada por Iñaki Barredo y Natalia López, a pesar de haber sufrido la rotura del cable del embrague de su Ford Escort MK-I en la segunda etapa, en el reagrupamiento de Ampuero, siendo Begoña Etxebarria y Solsoles Eguiluz, madre e hija, las ganadores en la clasificación reservada a féminas, por lo que recibieron sus correspondiente trofeos.
En la clasificación reservadas a Escuderías, se llevaban los trofeos la Real Peña Motorista Vizcaya, la Escudería BRC y la Escudería Repsol Bilbao, tras ocupar las tres primeras posiciones al final de la prueba, mientras que en la categoría Sin Instrumentos de navegación, el triunfo final y los trofeos respectivos correspondían a los bilbaínos Juan Lavado y Natividad Lorido, sobre un Opel Ascona Sport, seguidos de Sergio Urrestarazu y Jesús Gil (Mazda RX-7), y Jorge Marroquín y Begoña Pereda, con un Seat 124.
El cuadro de honor en esta cita, que ha sido un rotundo éxito en todos los sentidos, se completaba con Luis María y Mikel Oleaga, que se llevaban los trofeos como ganadores de la Categoría F (vehículos fabricados con anterioridad al año 1970), Manuel Macho, padre e hijo, como ganadores de la Categoría G(vehículos fabricados antes de 1980), y Carlos García junto a Víctor Garay, que con su VW Golf Gti lideraban la Categoría H (vehículos fabricados con posterioridad a 1980).
En resumen, una dura prueba, a la que a diferencia de pasadas ediciones le ha acompañado el tiempo, en lo que a climatología se refiere, ya que el sol ha estado presente durante las tres jornadas, en las que se han recorrido más de mil kilómetros, siendo mas de la mitad de tramos cronometrados, y que ha sido seguido masivamente por los aficionados, tanto en la jornada de salida, el pasado viernes en El Arenal de Bilbao, como durante todos los reagrupamientos en las localidades de Gernika, la Bien Aparecida, Santander, Ampuero, a lo largo de todos los tramos, y sobre todo en el parque cerrado final en Bilbao, que presentaba un inmejorable aspecto, con miles de aficionados agasajando a los supervivientes en esta cita.
Servicio Prensa Rallystone 2010